Montañas de trabajo, llamadas por atender…¿suena insoportable verdad?
¿Habéis sentido que no podíais más, con ganas de rendiros y dejarlo todo sin más?
Estáis ante un síndrome que resulta muy común en la actualidad, con consecuencias importantes ya que puede afectar al bienestar psicológico y físico. Asimismo, deteriora la salud de las organizaciones.
Ha habido un incremento de este síndrome ya que el carácter del trabajo ha ido cambiando y cada vez más, se precisa de un esfuerzo mental en todas las tareas, motivado en gran medida por la informatización del proceso de producción. Además, el trabajo ha ido incrementando con un menor número de trabajadores y se deben alcanzar los mismos resultados e incluso mayores. Por otro lado, la situación de nuestra economía actual no ayuda, ya que provoca continuamente situaciones que suponen un reto para los trabajadores.
¿De qué síndrome estamos hablando?
Nos referimos al «Burnout«, también llamado síndrome del trabajador quemado. Es un tipo de estrés laboral conocido como crónico.
Se caracteriza por:
- Progresivo agotamiento físico y mental
- Falta de motivación absoluta por las tareas realizadas
- Cambios de actitud
¿Cuáles son los síntomas?
Hay dos vertientes, a nivel emocional y a nivel físico. No obstante, los síntomas son similares al estrés laboral pero con mayor intensidad y más prolongados en el tiempo.
Síntomas a nivel emocional:
- Irritabilidad y mal humor
- Malos modales
- Conflictos innecesarios con clientes y compañeros
- Están a la defensiva
- Sarcásticos
- Desmotivados
- Indiferentes
- Agotamiento mental: el desagaste del burnout hace que su resistencia al estrés sea cada vez menor
- Falta de energía y menor rendimiento
Síntomas a nivel físico:
- afecciones del sistema motor: dolores musculares y articulares
- otras alteraciones psicosomáticas: problemas gastrointestinales
¿Cuáles son las causas?
Cualquiera de las siguientes a largo plazo y de modo continuado pueden desencadenar la situación de Burnout:
- Puestos relacionados con la atención al público
- Acoso laboral
- Elevado nivel de responsabilidad
- Jornadas laborales demasiado largas
- Trabajos muy monótonos
¿Y sus consecuencias?
- Aumento del riesgo de alcoholismo o consumo de drogas
- Alteraciones del sueño
- Bajada de defensas
¿Cómo prevenirlo?
Lo que deben hacer las organizaciones…
- Deben actuar sobre el ambiente laboral, identificar, reducir el estrés y la sobrecarga laboral
- Detectar a las personas estresadas y reducir las fuentes de estrés sobre ellos. Por ejemplo, mejorando las interacciones entre los grupos de trabajo
- Deben ofrecer una formación adecuada para prevenir el estrés (la formación en emociones)
Lo que está en vuestras manos…
- Adoptar un estilo asertivo ante nuestros compañeros y superiores con el fin de que las relaciones laborales y el trabajo en sí no se vea deteriorado por los malos entendidos
- No comprometernos a hacer cosas sobre las que o no nos sentimos capacitados o bien no es nuestro trabajo hacerlo
- Ajustar nuestras expectativas, éstas nos deben ayudar a crecer profesionalmente, tener unas metas y valorar nuestro estado actual
Ya lo dijo un sabio… «Escoge un trabajo que te guste y nunca tendrás que trabajar«, Confucio.