Quiero recuperar la concentración y no puedo

Personas muy productivas en las redes, propósitos diarios y yo sigo sin poder concentrarme como solía hacerlo… ¿A ti también te pasa? Es muy común. Por cada persona que «parece» productiva a través de las redes, hay muchas más que no consiguen alcanzar la concentración. Dado que tus niveles de estrés y ansiedad han aumentado, los niveles de concentración y atención han ido menguando. No te rindas, esto tiene remedio y conseguirás concentrarte cada vez mejor. En este post, verás ciertas pautas para gestionar la concentración.

¿Qué puedes hacer para gestionar tu concentración?

Primer paso: lleva a cabo descansos efectivos. Para ello, es importante mantener hábitos saludables de descanso. Si tu cerebro no descansa, no rindes bien.

Segundo paso: desconecta tu móvil para evitar distracciones cuando hagas una tarea que requiera de tu atención. El aumento de uso del móvil, te resta concentración y te mantiene en alerta ante posibles mensajes, noticias, etc. Apágalo o ponlo en modo avión.

Tercer paso: lleva a cabo una organización de las tareas importantes a realizar durante el día y ordénalas según su importancia o dificultad. Esto es muy personal ya que hay personas que se concentran mejor por la tarde para tareas difíciles, y otras, que escogen la noche como momento de paz para concentrarse.

¿Tus días son como el día de la marmota y no te apetece hacer tus tareas? La psicología puede ayudarte.

Cuarto paso: no dudes en compartir tus emociones. Ventilarlas te ayuda a descargar y llenarte de energía para afrontar mejor el día sin cargas.

Quinto paso: respeta tus pausas y descansos, tu atención no es infinita. Cuando te notes cansado, para, levántate, asómate por la ventana, bebe agua y vuelve más despejado.

Sexto paso: no te exijas tanto, acepta que estás viviendo una situación diferente y las emociones están a flor de piel. No te presiones, lo estás haciendo lo mejor que puedes.

La falta concentración no es tu enemiga, es una señal de aviso sobre lo que pasa a tu alrededor. Escucharla es importante, no obstante, no te quedes hablando con ella todo el día. Ahora que la conoces y te vas conociendo más a ti mismo, paso a paso irás gestionando mejor la concentración. No te exijas tanto y trátate con cariño. Tu sabes lo que es mejor para ti, empieza el camino hacia tu autoconocimiento.

Para elegir sabiamente en la vida uno debe escucharse a sí mismo, a su propio yo, en cada momento de su vida, Abraham Maslow.

Andrea Martínez Pellicer

Agradecimientos al autor/a de este dibujo que representa a nuestra mente tal y como es en estos momentos, tan sensibles a cualquier ráfaga de aire como el diente de león.

Deja un comentario